Curriculum

 

Referentes universales de la carrera de Licenciatura en Odontología de la Universidad de Costa Rica

Un modelo educativo puede ser definido como “un esquema científico-técnico que sirve de mediador y filtro entre la realidad y la teoría, entre la ciencia y la praxis” y es el producto de la investigación de la realidad y el medio. Los modelos curriculares son instrumentos que permiten analizar, diseñar, implementar y controlar las fases del proceso curricular constituyendo una “representación simbólica de la forma cómo se percibe la realidad enseñanza-aprendizaje” (Martínez E. 1992).

En Latinoamérica los planes y programas de estudio de las Facultades de Odontología se encuentran fundamentados en tres modelos distintos: 1. El “tradicional” (derivado del informe Flexner de 1910). 2. El “norteamericano” (surgió alrededor de los años 70) y 3. El “latinoamericano” propuesto por la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud (surgió en los años 70) (Martínez AR. 2008), (Beltrán R. 1998).

En el modelo tradicional los contenidos biomédicos básicos se introducen en los dos primeros años de carrera, los cursos se organizan por especialidades clínicas, la atención tiene un enfoque curativo orientado a la enfermedad (biológico mecanicista) y hay una distribución por cátedras, pues el aprendizaje se encuentra centrado en el personal docente (Martínez A., et al 1994) .

En el modelo norteamericano se conserva un enfoque curativo y rehabilitador, pero se empiezan a introducir ciertas prácticas preventivas. El plan de estudios se organiza en cursos aislados y se enfatiza el cumplimiento de los objetivos especificados en el programa. El plan de estudios introduce las asignaturas del área básica y médica en los primeros años de la carrera.

Las clínicas son organizadas por especialidad, y las clínicas integrales se ubican en el último año de la carrera. Se observan algunas asignaturas relacionadas con la salud pública.  En contraste con el modelo tradicional, en el norteamericano el ser humano se conceptualiza como una unidad biopsicosocial y el aprendizaje se encuentra centrado en el estudiantado (Martínez A., et al 1994), (Beltrán R. 1998).

En el modelo educativo denominado innovador o ecologista (latinoamericano) el elemento esencial de la formación académica es la comprensión del proceso de salud-enfermedad en el ámbito colectivo y en el personal. En este modelo confluyen dos vertientes: una que establece el proceso salud-enfermedad como objeto de estudio y otra que lo visualiza como objeto de transformación. El ser humano se concibe como una unidad biopsicosocial (al igual que en el norteamericano), el plan de estudios se sustenta en la corriente cognitiva, y el aprendizaje se considera un proceso en el que tanto el estudiantado como el personal docente son sujetos y objetos activos. El plan de estudios se estructura en módulos (áreas) donde se relaciona la teoría con la práctica realizada. Los módulos incluyen contenidos sociales y se organizan para promover una formación integral, un enfoque preventivo, el trabajo en grupo y una práctica clínica que incorpora varias disciplinas (clínicas integrales). Las clínicas integrales se introducen desde los primeros años de la carrera (Beltrán R. 1998), (Martínez A., et al 1994), (Martínez AR. 2008).

El modelo curricular  de la carrera de Licenciatura en Odontología

Es un híbrido entre el modelo innovador y el modelo norteamericano. El Plan de Estudios exhibe algunos elementos propios del modelo innovador: programas preventivos, contenidos epidemiológicos y una organización administrativa departamental donde se observa una orientación hacia la docencia y el servicio. Asimismo, siguiendo los lineamientos de la Universidad de Costa Rica, tiene elementos importantes de formación humanista.  Sin embargo acorde con el modelo norteamericano, en algunas asignaturas se conserva un enfoque curativo y rehabilitador que se enfatiza en cursos aislados. Además, se puede observar que se introducen las asignaturas del área básica y médica en los primeros años de la carrera, posteriormente las clínicas organizadas por especialidad, y las clínicas integrales en el último año de la Licenciatura.

La Asociación Americana de Educacional Dental (ADEA) incluye la reforma curricular y la innovación como aspectos esenciales para el desarrollo de la profesión odontológica. Ya desde la década pasada se ha iniciado un considerable debate sobre la necesidad de introducir cambios curriculares en la enseñanza de la Odontología (Kassebaum D., et al. 2004).

Las investigaciones realizadas en los Estados Unidos de América sobre los procesos curriculares señalan que, por lo general, el estudiantado y el personal docente se encuentran insatisfechos con la redundancia y la poca coordinación entre los contenidos de los cursos del Plan de Estudios de las carreras de Odontología (Field M.J, ed. 1995) (Ryder M.I., et al. 2008). 

La densidad del Plan de Estudios, en términos del número elevado de cursos y las horas de dedicación, es una de las principales críticas que se hacen al currículum de la carrera, pues dicho plan no permite al estudiantado consolidar los conceptos aprendidos ni desarrollar un pensamiento crítico (Crawford J. M., et al. 2007) (Kassebaum D., et al. 2004). 

Hendricson y Cohen (2001) señalan que la densidad curricular es el resultado de dos posiciones opuestas asumidas por el profesorado de la carrera: una que enfatiza los aspectos biomédicos del tratamiento del paciente y favorece la expansión de la temática respectiva y otra que desea mantener el enfoque técnico tradicional del currículum; incluso en la actualidad, durante la enseñanza clínica de la Odontología se hace más énfasis en los procedimientos efectuados que en la atención integral de la persona (Field M.J, ed. 1995).

Fuente: Howard, M., y Jiménez M.M. (2009). La reforma curricular de la carrera de Licenciatura en Odontología en el contexto del proceso de autoevaluación. Edición Extraordinaria Revista Odovtos, Autoevaluación y Acreditación, 11, 26-35.